¿Te suena la frase renovarse o morir? Si bien es cierto que nadie quiere morir, los cambios dan miedo porque se hablan de una transformación. El camino hacia lo incierto apoya este sentimiento que se acompaña de duda y escepticismo.

La reingeniería de procesos es una herramienta a través de la cual se busca una mejora radical, dejando a un lado los pequeños cambios (mejora continua) y yendo más allá, creando ventajas competitivas.

Nuestro expertos en COMTITEC lo guiarán por una serie de pasos en cada uno de los cuales se obtiene información valiosa para ayudarlo a mejorar, siempre apoyado de las tecnologías de la información.

El primer paso es el análisis situacional, la organización deberá responder a cuestionamientos sobre sus procesos: ¿Por qué lo hacemos así?. Es importante aclarar que se está buscando un cambio desde la raíz de los procesos, a quienes sí se aplica la reingeniería, y no a la organización como tal.

El rediseño es la médula ya que se detallará y planificará según los resultados obtenidos en el análisis. Cuando un proceso es rediseñado a través de este método puede adquirir ciertas características como la unificación de tareas, los colaboradores son parte de las decisiones, existen diferentes versiones de las tareas según el contexto, entre otras.

En la ejecución se pone en marcha el rediseño siempre en miras de obtener las estrategias y objetivos planteados hacia la obtención de ventajas competitivas. El éxito se reflejará en toda la organización, por ejemplo, colaboradores altamente capacitados para desarrollarse sin supervisión y organizaciones flexibles ante los cambios.

Una mejora radical es una mejora significativa. Imagine cómo sería si una empresa con muchos contactos no contará con una base de datos electrónica y sólo se limitará a anotarlos en una libreta.